El ángel del abismo
La evolución de Satán en la Biblia
Description:... Originándose en el tronco de las religiones abrahámicas, así denominadas por partir del patriarca hebreo Abraham, el cristianismo constituye la religión mayoritaria en el mundo, iniciándose en el Levante mediterráneo, en la primera mitad del siglo I de la era común, a partir de las enseñanzas de Jesús, un rabino apodado Cristo en griego, y considerado hijo del dios hebreo Jehová.
Los textos sagrados del cristianismo están recopilados en la Biblia, un conjunto de libros escritos por la mano del hombre a lo largo de los siglos, pero que dentro del pensamiento cristiano se suponen inspirados directamente por dios, y que adoptaron su actual forma al principio de la era común.
A su vez, la Biblia se divide en dos partes, el Antiguo Testamento, que incluye los textos sagrados del judaísmo, y el Nuevo Testamento, que recoge los textos puramente cristianos, y que conjuntamente constituyen la base del pensamiento cristiano; al margen de ellos se encuentra también un amplio abanico de textos religiosos judeocristianos, denominados apócrifos, que no se hallan incluidos en las Escrituras por considerarse carentes de inspiración divina, pero que sí influyeron sobre los autores de los textos canónicos. Y además de los textos, inspirados y apócrifos, gozan de especial relevancia y aceptación las elaboraciones y doctrinas teológicas formuladas por las diferentes sectas e Iglesias, entre las que destaca la católica, por ser la mayoritaria y también una de las más antiguas.
De este conjunto de relatos, creencias y doctrinas emana un sistema de pensamiento integral, una cosmovisión desde la que interpretar el conjunto de la realidad: el marco teórico cristiano.
La cosmovisión cristiana también incluye la creencia en otro ser dotado de grandes poderes, pero frontalmente opuesto a dios: Satán, el diablo, la personificación del mal y el pecado, soberano de un mundo ultraterreno, el infierno, y caudillo de demonios y espíritus maléficos. La figura de Satán procede de los primeros textos hebreos, que recogen la historia antigua del pueblo israelita: los sucesivos escritos de los que se compone la Biblia, y algunos otros entre los apócrifos, muestran sus diferentes aspectos y encarnaciones, así como su relación con el dios de los judíos, Jehová, y con su hijo, Jesús. La cultura popular, por su parte, ha llegado a identificar a Satán con uno de los ángeles, que, rebelándose contra los planes y decretos del dios bíblico, fue expulsado del cielo al infierno, donde construyó su propia soberanía, llegando a convertirse en un anti-dios.
El presente texto constituye el libro cuarto de la serie El martillo de dios, y estudia el origen de Satán a partir de los escritos bíblicos que conforman el Antiguo Testamento, el contexto del que surge, así como otras figuras de similares características, procedentes tanto del canon hebreo como de culturas de su misma época y entorno, y que, del mismo modo, personifican el reverso maléfico de unas deidades a las que generalmente se conceptualiza como benéficas; a continuación traza la evolución en su figura, en función de los cambios históricos y teológicos, las influencias en dicha evolución, y la cronología que demuestra la incompatibilidad entre los diferentes relatos, revelando, por último, una oscura trama de engaño y manipulación tejido a su alrededor.
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